Como lo hemos mencionado en otras oportunidades, las fibras sintéticas aramidas son materiales clave en el blindaje automotriz debido a sus propiedades, pero también son una materia prima en torno a la que giran muchos datos interesantes. En esta ocasión te invitamos a conocer más sobre sus cualidades físicas y químicas.
Previamente en nuestro blog hemos explicado la función que desempeña cada uno de los materiales y cómo se usan las fibras sintéticas aramidas en el blindaje. En esta ocasión retomaremos el concepto de fibra aramida (derivada de la contracción de aromático y poliamida) para detallar cuáles son las aplicaciones de estos polímeros en el blindaje de autos.
Suelen elaborarse a partir de fibras de Kevlar o Nomex; la primera de ellas es una para-aramida y la segunda, una meta-aramida.
En virtud de esta clasificación, las mantas elaboradas a partir de kevlar ofrecen un alto nivel de resistencia (superior a la del acero) y un excelente desempeño ante amenazas como la abrasión repetida, la flexión o el estiramiento.
Otros aspectos que han popularizado el uso de este material en el blindaje son propiedades físicas como el ser liviano y robusto, con lo cual, a diferencia de otras fibras empleadas con el mismo propósito, permite un blindaje más ligero y evita el desgaste del vehículo a causa de su instalación.
Las mantas de este material también se caracterizan por su durabilidad, al ser resistentes a distintas amenazas y no deteriorarse con el agua o las altas temperaturas.
Por su parte, la fibra Nomex en su calidad de meta-aramida, entrega ventajas como estabilidad química y térmica, llama retardante, aislamiento eléctrico y resistencia a la radiación.
Anteriormente, este era uno de los materiales más socorridos para el revestimiento de vehículos. Poco a poco ha sido reemplazado por el Kevlar, pero ello no implica que haya perdido importancia en la protección de los vehículos, siendo utilizado en años recientes para el revestimiento de partes que pudieran quedar descubiertas, tales como manijas y cerraduras.
El también llamado “Kevlar de cuarta generación”, aligera el blindaje de vehículos en aproximadamente un 25% y lo adelgaza en un 20%. También ofrece una mayor flexibilidad, con lo que se optimizan los tiempos de instalación. Esta variedad de kevlar ha hecho posible blindar vehículos que antes no habrían sido aptos para recibir este tratamiento, como es el caso de los autos familiares de gama media.
Aunque los polímeros conocidos como aramidas fueron desarrollados por la compañía DuPont en la década de los 60. El descubrimiento del Kevlar, en realidad se produjo por accidente en 1956, cuando la científica Stephanie Kwolek, realizaba unas pruebas de laboratorio que no arrojaron los resultados esperados: parecía un error y terminó convirtiéndose en la materia prima esencial para la fabricación de chalecos antibalas, aplicaciones en el ciclismo, la industria automotriz y la telefonía.
Estos materiales se encuentran en todo tipo de situaciones extremas, como en la fabricación de trajes espaciales y de los cascos y motores que se emplean en las competencias de fórmula I y tienen aplicación en el blindaje de alas de aviones y motores de jets.
Como hemos visto, las fibras sintéticas aramidas poseen múltiples aplicaciones más allá del blindaje, siendo algunas de ellas verdaderas sorpresas. En TPS Armoring utilizamos los materiales idóneos para garantizar una experiencia segura en cada uno de tus trayectos. Blinda tu vehículo con nosotros y comprueba que tu tranquilidad y la de tu familia es la mejor inversión.