MANTENIMIENTO AL VEHICULO

El mantenimiento de un auto blindado es esencial para evitar averías que pudieran poner en riesgo a sus ocupantes.

El blindaje refuerza la estructura del auto y da seguridad personal al usuario, pero ¿de qué serviría si el vehículo falla a medio camino? Quedarse varado indudablemente incrementaría la vulnerabilidad de las personas que está destinado a resguardar.

El servicio de mantenimiento de una camioneta blindada o un sedán reforzado debe realizarse con mayor frecuencia que el de un vehículo común, ya que el peso que añaden los materiales de blindaje representa para el motor y las llantas un desgaste más rápido.

Cuando se trata de dar mantenimiento a tu auto blindado, quién mejor te puede aconsejar es la propia empresa que aplicó el blindaje, ya que no se trata solo de revisar la parte mecánica del vehículo, sino también los cristales y el resto de las partes reforzadas.

Sin embargo, lo que requiere una atención especial es el motor de fábrica, la suspensión y los amortiguadores para uso rudo que posiblemente se hayan cambiado para soportar el mayor peso de la unidad.

 

Estos son algunos aspectos que se deben revisar durante un mantenimiento:

  • Cualquier ruido que presente el vehículo durante la marcha, pues pueden indicar que alguna de las partes agregadas no fue ajustada debidamente.

  • El inflado y estado de las llantas, así como del sistema de amortiguamiento.
  • La alineación de las llantas, pues un desajuste puede conducir a un desgaste más rápido de las mismas.

  • Niveles de líquidos y lubricantes; el esfuerzo que requiere el motor demanda un consumo mayor de lo usual y, por tanto, una revisión más frecuente.

  • Filtraciones de la batería que pudieran significar que se reduzca su tiempo de funcionamiento. También es importante verificar que no se acumulen minerales en los contactos que pudieran impedir el paso de la corriente.

  • Las partes reforzadas que hayan sufrido golpes o fricciones pues su alta resistencia no es eterna y se va minando si no reciben mantenimiento o no son cambiadas.

 

Precauciones que hay que tomar

Además del cuidado que requieren las partes mecánicas y blindadas, es importante tomar algunas precauciones para evitar averías o desgastes antes de tiempo. Entre estas mencionaremos:

  • El correcto inflado de las llantas reforzadas evitará que el soporte interior se mueva de su lugar y produzca vibraciones al estar el vehículo en movimiento.

  • Verificar que el gato hidráulico soporte el mayor peso de la unidad es buena idea, pues no querrás comprobarlo cuando se requiera cambiar una llanta en una emergencia.

  • Las puertas no deben mantenerse abiertas cuando no sea necesario, pues su mayor peso tenderá a vencer las bisagras, ni tampoco deben cerrarse estando abajo los cristales pues estos podrían quebrarse.

  • Los frenos están sometidos a mayor fricción por el peso adicional del vehículo y se deben revisar periódicamente.

  • El vehículo debe mantenerse a la sombra la mayor parte del tiempo pues la película de bicarbonato que protege los cristales tiende a expandirse con el calor y se despegaría.

Deja de preocuparte por "cómo cuidar mi vehículo blindado" y pide a la empresa que realizó su reforzamiento que te elabore un calendario de servicios adecuado.

Ellos son los expertos que revisarán hasta el último detalle de la unidad y te indicarán cuando haya alguna reparación preventiva que realizar.