Las medidas de seguridad al manejar efectivo cubren varios aspectos, todos destinados a salvaguardar tanto el dinero mismo como la integridad de quien lo retira o transporta.

Aun cuando muchas de las transacciones comerciales, sobre todo las de mayor cuantía, deben realizarse de manera electrónica por requerimientos fiscales, las empresas siguen necesitando contar con cierto monto en efectivo para efectuar algunos gastos corrientes.

En el caso de los establecimientos comerciales de venta al público, ni se diga. Las compras en efectivo siguen imperando y llegan a sumar grandes cantidades que, dependiendo del tamaño del negocio, se tienen que resguardar y transportar a un banco cada día o cada semana.

Desde la creación de una política para la gestión de la caja chica de la empresa hasta la capacitación del personal encargado de hacer los depósitos periódicos, todas son medidas que deben formar parte de tu guía de seguridad al trabajar con efectivo a fin de garantizar que el dinero y tus empleados estén protegidos.

¿Cómo manejar el efectivo?

Dentro de la empresa, debes designar a una persona encargada del manejo del dinero y el registro en los libros de contabilidad de cada gasto hecho en efectivo.

La ley establece que estos desembolsos no pueden ser mayores de 2 mil pesos, y que todo gasto superior a esa cantidad debe hacerse a través de la cuenta bancaria empresarial.

El dinero de la caja chica, así como el correspondiente a las entradas por ventas directas, debe resguardarse en un lugar seguro, como una caja fuerte o una bóveda, al que solo tengan acceso empleados autorizados.

En cuanto al uso de cajeros automáticos, las recomendaciones, no solo para tus empleados que manejan efectivo sino también para ti, son:

• Utilizar solo los que estén en lugares concurridos o bien iluminados.
• Revisar que no estén alterados.
• Estar alerta a la presencia de personas sospechosas en sus alrededores.
• Ocultar el teclado cuando se introduzca el Número de Identificación Personal (NIP).
• Contar y guardar el dinero y la tarjeta discretamente antes de salir.

También debes tener una política de traslado de efectivo, que no solo establezca reglas para el manejo del dinero, sino también sirva de manual de capacitación para los colaboradores encargados de hacerlo.

¿Cómo transportar el efectivo de una manera segura?

Aun cuando el medio más socorrido es la contratación de una empresa dedicada al traslado de valores, en muchos casos, por la cuantía del dinero manejado o la frecuencia de los depósitos, esto resulta inconveniente, costoso o, incluso, más riesgoso.

En caso de realizar retiros o depósitos de dinero de las ventanillas de las sucursales bancarias, es importante:

• Estar atento a movimientos o personas sospechosas al llegar, dentro y al retirarse.
• Hacerse acompañar por uno o más compañeros
• Dirigirse de inmediato al vehículo de traslado, si está blindado mucho mejor.
• Cambiar de horarios, sucursales y rutas para no establecer una rutina que facilite la labor a los delincuentes.

Un vehículo blindado de apariencia modesta es una excelente solución, pues su discreción evita que se atraiga la atención de los delincuentes, quienes no solo pueden atentar contra tus empleados durante el trayecto hacia o desde el banco, sino también contra las instalaciones del negocio.

Ya sea que decidas comprar o rentar un auto blindado, es importante que capacites debidamente a tu personal en tácticas de manejo defensivo u ofensivo, para que, en caso de detectar una amenaza sepan cómo reaccionar y mantenerse a salvo, junto con el dinero.

TPS® Armoring tiene en venta y renta una amplia variedad de vehículos blindados nuevos y seminuevos de bajo perfil para satisfacer las necesidades de tu empresa en cuanto al traslado discreto de valores.

Asimismo, ofrece los cursos de capacitación en conducción segura para que tus empleados realicen los traslados y depósitos protegiendo no solo el dinero de la empresa sino, sobre todo, su integridad personal.

En TPS® Armoring cuentas con un aliado que pone a tu disposición vehículos blindados para velar por tu protección, la de tus empleados y la de tus valores cuando estén en tránsito.